El pasado 27 de agosto, Youssouf Sabaly se enfundó la camiseta del Real Betis por última vez. Aquel día, el lateral senegalés disputaba su tercer encuentro liguero y completaba su tercera titularidad en lo que iba de temporada. Sin embargo, una serie de contratiempos físicos le alejaron de los terrenos de juego durante seis meses.
Tras un largo periodo de recuperación, Sabaly regresó al equipo verdiblanco enfrentándose a uno de los partidos más exigentes: nada menos que contra Berenguer e Iñaki Williams. A pesar de las adversidades, incluyendo jugar desde el perfil izquierdo debido a las ausencias por lesión y sanción de Abner y Miranda respectivamente, demostró estar a la altura con una actuación destacada.
No solo cumplió defensivamente sino que Sabaly también mostró sus habilidades ofensivas, proyectándose varias veces hacia adelante y centrando con su pierna menos hábil. Su profundidad fue un soplo de aire fresco para el Betis, cuya banda izquierda había carecido recientemente de sorpresa y efectividad.
Medio año después, Sabaly volvió no solo a pisar el césped sino a completar todo el partido. Incluso tuvo oportunidades claras frente al arco rival; en una jugada personal logró superar a Iñaki Williams y estuvo cerca del gol si no fuera por la intervención final de Ruiz de Galarreta.
La emergencia llevó a Sabaly a ocupar la posición de lateral izquierdo donde rindió excepcionalmente bien, incluso superando las últimas actuaciones ofrecidas por Bellerín en ese flanco. Ahora surge la duda sobre qué decisión tomará Manuel Pellegrini respecto a la disposición táctica del equipo.
¿Optará Pellegrini por reajustar sus laterales o seguirá confiando en Sabaly? La situación contractual de Miranda añade incertidumbre al futuro inmediato del conjunto bético. Lo cierto es que, mientras siga sin recaer en su lesión muscular, parece claro que Sabaly debería tener un lugar asegurado en cualquier puesto defensivo del Betis.